Cómo el Derecho de Empresas potencia el ejercicio legal

En un mundo donde las empresas enfrentan cada vez mayores complejidades legales y económicas, la especialización en Derecho de Empresas se vuelve una herramienta clave para los profesionales del derecho.

Lourdes Llorvandi, abogada y docente universitaria, nos comparte su experiencia como estudiante de la Maestría en Derecho de Empresas de la Escuela de Posgrado de la Universidad Católica de Córdoba (UCC), una decisión que marcó un antes y un después en su carrera.

Lourdes, oriunda de Frías, Santiago del Estero, y actual delegada en Córdoba de la Dirección Nacional de Migraciones, tiene una trayectoria académica destacada: estudió Derecho, Escribanía y Profesorado Universitario en la UCC, donde además se desempeña como docente en la carrera de Derecho. Su interés por el asesoramiento integral a empresas la llevó a elegir la Maestría en Derecho de Empresas, una decisión que respondió a su búsqueda de una mirada jurídica específica y diferenciadora en el mundo corporativo.

El camino de la especialización no estuvo exento de desafíos. Para Lourdes, una de las materias más desafiantes fue Análisis Contable. "Para nosotros, como abogados, es un desafío intentar ponernos en la cabeza de un contador y entender todo lo que sucede en ese universo", comenta.

Sin embargo, destaca la importancia de este conocimiento para brindar un asesoramiento adecuado: "Muchas veces los abogados solo nos abocamos a la cuestión jurídica sin adentrarnos en lo económico, y eso es un error, ya que ambas dimensiones van de la mano".

Los aspectos más relevantes de la maestría

Más allá de los contenidos académicos, Lourdes destaca tres aspectos fundamentales de su formación en la maestría:

El valor del grupo humano: "El grupo de compañeros que se formó es algo increíble", expresa. Con edades que oscilaban entre los 25 y 55 años, la diversidad de perspectivas enriqueció el aprendizaje. "Muchas veces, el debate más enriquecedor nacía de un comentario entre compañeros".

La reafirmación vocacional: "Redescubrimos si lo que estamos haciendo nos gusta o no. En el proceso, muchos reafirmamos que esta temática es realmente nuestra pasión".

El contacto con los profesores: "Tuvimos docentes de primer nivel, muy generosos con su tiempo y conocimiento. Muchos de nosotros los contactamos por consultas específicas, y siempre estuvieron dispuestos a ayudarnos".

Para Lourdes, la aplicación de los conocimientos adquiridos en la maestría es un proceso natural e inmediato. "No es algo que planeás aplicar, simplemente surge. Estás estudiando una causa o hablando con un cliente, y de repente recordás lo que dijo un profesor en clase o alguna jurisprudencia relevante que vimos", explica. Este enfoque práctico y dinámico es una de las grandes ventajas de la maestría, ya que permite que los conceptos académicos se transformen en herramientas útiles para la vida profesional.

Actualmente, Lourdes está en la etapa de elaboración de su Trabajo Final, una tarea que equilibra con sus obligaciones diarias. "Desde el día cero, los profesores nos incentivan a definir un tema y avanzar en su desarrollo. Ese incentivo es clave, porque combinar el Trabajo Final con la vida profesional no es fácil, pero tampoco imposible", sostiene.

Su investigación se centra en una comparación entre las diferentes modalidades contractuales utilizadas por las estaciones de servicio con las petroleras o expendedoras de combustibles, un tema con un fuerte impacto en el sector empresarial.

Lourdes Llorvandi es un claro ejemplo de cómo la formación continua y la especialización pueden potenciar una carrera profesional. Su paso por la Maestría en Derecho de Empresas no solo le brindó nuevas herramientas, sino que le permitió reafirmar su pasión por el derecho corporativo y su compromiso con un asesoramiento integral para las empresas. "La clave es nunca dejar de aprender", concluye.

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