Publicado el 15-09-2024 en El Diario Cba (Villa María, Prov. de Córdoba)

Lo pisado, pensado

La politóloga villamariense María Lasa, publicó “País de vinalón”, un libro que narra su viaje a Corea del Norte y los días donde vio cómo iba cayendo, paso a paso, la coreografía de un régimen totalitario.

Antes de que la politóloga villamariense, María de los Ángeles Lasa, publicara País de Vinalón (Ucasal, 2024), sus palabras salieron publicadas en el suplemento cultura de elDiario debido a una muestra fotográfica virtual realizada en tiempos de pandemia de Covid-19 en la Usina Cultural.

Hace pocos días, su libro, una especie de roadmovie dantesca, vio la luz y fue consumida por avidez por diferentes públicos. Este texto descriptivo aborda la visita -junto a su madre- de uno de los países más herméticos del mundo: Corea del Norte.

En las doscientas páginas de este volumen, que puede descargarse también gratuitamente, habita un acervo repleto de datos, definiciones, apreciaciones y descripciones. En sus páginas se encuentra un complemento para muchos interesados en la vida norcoreana o una puerta de ingreso para palpar (de primera mano) con qué escenario y coreografía se encuentran los visitantes. Lugares húmedos, un frío que cala los huesos, pocas alternativas gastronómicas y una puesta en escena que por momentos cae, ya que su creación es bastante dudosa.

El país, inmiscuido dentro de la filosofía juche, tiene hoy al mando a Kim Jong-Un, un dictador declarado líder supremo de la república democrática (?) desde el año 2011. Él es el líder del Partido del Trabajo desde 2012. Pero Lasa no duda y acierta: no existe democracia ni política, existe violencia.

En menos de siete días, y a pesar de que la visita turística está guionada para que nadie vea más allá de lo que debe mirar, la autora se encontró con groseras digresiones que, al volverlas libro, se reúnen como un racimo de incongruencias.

Aquel cuento de la izquierda terminó legitimando a un poderoso de derecha que no duda sacar todas las fuerzas del Estado para amedrentar a sus ciudadanos por medio de organismos de delación. Aquella narrativa de un emperador amoroso cae dentro de las limitaciones a la libre expresión y en apostillas con las que Lasa se va encontrando en el camino: cortes de pelo sugeridos, colores de ropa y farsas varias, como una agente de tránsito que le hace señas a la nada.

Sin dudas, y a riesgo de adelantar lo escrito, la obra es valorada no solo a nivel nacional, sino también internacional: muchos influencers han viajado en búsqueda de generar un show a base del sufrimiento ajeno. Varios youtubers han intentado desenmascarar lo ocurrido allí por medio de la intimidación. Pero Lasa logró generar un vínculo con los “guías” turísticos y comprender las grietas por donde se filtran las dudas de aquellos que habitan un país que sufre mala alimentación, falta de energía y dudosa calidad en su agua potable.

Lasa estudió Relaciones Internacionales, en la Universidad Católica de Córdoba; Políticas Públicas, en la Universidad de Oxford, Inglaterra; y Ciencia Política, en Italia. La historia contada podría tener perfiles académicos, repletos de terminología y ejemplificaciones varias, pero fue más simple -meramente- contar lo que se vivió, empatizar y humanizarse. Una cosa es prometerse contar todo y otra cosa bien distinta es comprometerse. Vladimir Nabokov dice que a muchas personas les llega “su día” y no se dan cuenta hasta que pasaron varios años. Lasa se dio cuenta, en el momento justo y en lugar indicado, que ese era el “día” donde podía aportar al bien colectivo, tal vez rascando un poquito las marquesinas norcoreanas para encontrar la mugre que está debajo.

Y es loable no haber caído en clichés. Los amantes de la narrativa agradecen la descripción concienzuda de los contextos. A veces sucede que los escritores viajan a otras latitudes y lo cuentan desde un pedestal, transformando a los visitados en animales dentro un zoológico o sintiéndose sociólogos de un hecho marginal.

Existe el impulso de terminar este libro y comenzar a leer El otoño del patriarca, de García Márquez. Y siempre se agradece.

¿Qué es el vinalón? Habrá que averiguarlo en la publicación.

Medio Publicado: El Diario Cba (Villa María, Prov. de Córdoba)

Temática: UCC

Autor/Redactor: Daniel Rodríguez

Fecha de Publicación: 15-09-2024